Si, a pesar de vivir como la reina del Egocentrismo jactándote de tu seguridad a cada paso, hay una muy pero muy maldita semana al mes que se encarga de cagarte la vida, de casi obligarte a pelearte con el mundo y mejor aún, de hacerte llorar por cualquier pelotudez.
Y como obvio no puedo quedar ajena, me suelo convertir en una CONCHUDA con todas las letras y odio cuando eso pasa, porque una es conciente de que se emperra por huevadas, que deja de sonreír aunque se haya curtido al más lindo de los lindos la noche anterior, y que sabe que no hay una mínima razón coherente para llorar porque faltan cuatro meses para junio y no se llega con la mudanza! O si?. En fin, te toca asumir que te convertiste en una trastornada mental, y que ya no vale la pena cuestionarte cómo puede ser verdad que todo te ponga con un humor del orto y porque que NADIE excepto tus mejores amigas puedan comprender porque mierda te volviste bipolar.
Mi consejo para pasar estos insoportables días es que sí, llorá por boludeces en paz, pero buscate buenos motivos para mortificarte: bajate la música que escuchabas con el reverendo hijo de puta del que te acabás de separar y/o clavate toda la noche del domingo mirando los informes fatalistas de “América” o “Policías en Acción”.
En fin, llorá como una desalmada y pasala como el culo, total en un par de días se te pasa y te quedan tres semanas más para explotar tu humor increíble como toda una diva…que sos!
"Divina Actitud" vuela entre las más simples reflexiones hasta las más profundas, pasando por pequeñas maldades, ironías y descargos psicológicos. En "Divina Actitud" van a encontrarse con historias de hombres, charlas de amigas y miles de anécdotas de nuestras vidas cotidianas. Es esta una invitación a leer y a reir, dos cosas que jamás deben perderse.
23 feb 2010
13 feb 2010
San Valentín ♥
No voy a caer en el sentimiento de martirio por tener que pasar "San Valentín" sin pareja como algunas desquiciadas que andan dando vueltas por ahi con carita de pena, rezándole a Santos nuevos y haciendo promesas idiotas. No, definitivamente no. Eso si, sigo sosteniendo mi creencia en el amor, al menos de a ratos y dependendiendo de a quién me tope en el camino.
Para mi, hace años que esta fecha dejó de ser “la más deseada de una vida plena de amor” para convertirse en una mera fantochada comercial, currera y aprovechadora de pobres parejas inseguras que la utilizan como confirmación de algo que a veces puede estar muy pendiente de un hilo.
Aclaro: Voy a dejar exentos a esos pequeños adolescentes enamorados, los del cosquilleo, los de las cartitas de amor en hojas “Rivadavia”, ahora si, los que hayan pasado esa etapa pueden empezar a leer mis bellas palabras.
Mientras pienso en lo que voy a escribir, me detengo (por unos segundos) para cuestionarme si es que me estoy poniendo un poco insensible con los años, con mis jóvenes y sabios (también humildes, claro) años…Pero inmediatamente me doy cuenta que no, que no se trata de sensibilidad o insensibilidad sino que estoy reivindicando justo hoy lo que pienso de esas parejitas insoportables que el 14 de febrero y gracias a las garcas empresas especializadas en Marketing potencian mis ganas de extinguirlas cual aporte a la sociedad.
Como obsequio y a falta de bombones con enorme moño colorado, les entrego una reseña con las características de las parejas pelotudas que de veras no tienen ni ton ni son:
♥El “Nos” inclusivo hasta por demás. Esas que piensan que haber dejado de ser una persona es lo mejor que les pudo pasar.
♥El abandono por completo del espacio propio para crear un lugar compartido que va desde el gimnasio, las compras en el súper, las reuniones con amigos y hasta las visitas familiares. Jamás voy a entender como existen personas que mueren de ganas por estar con la familia del otro para sentirse parte de “algo”. Queridos, vivan su pareja lejos y sin joderle el asado a nadie please!. (Ok. Esta va con dedicatoria…)
♥Esas parejitas en las que los tipos,pasados los 20 y pico, le compran ositos de peluche a su media naranja. Muy pero muy ridiculo y…grasoso, si.
♥Esas en las que las minas, novias de esos tipos regaleros, abrazan el oso horrendo como si tuvieran cinco años y le proponen a su novio pasar la tarde eligiéndole el nombre para bautizarlo como “el hijo” de la pareja. Es demasiado irritante.
♥El regalo de la caja de bombones carísimos con 40 grados de calor, no da. Posta que no dá.
♥Esa actitud de en San Valentín llevarte a un telo como la gente, solo porque es San Valentín tampoco dá chicos!.
♥Los apodos como “Chanchi” o “Osita”, o PEOR las que se dicen “Gordi” o “Bebé”. Diossssssssss! Ya nadie usa la creatividad, es evidente.
♥Los llamados constante por celular, porqué obvioooo ahora está eso de tener al otro “Free” y taladrarle el cerebro como re top!. (Si, me pongo reiterativa en este punto, lo reconozco). Son esas parejitas que están juntas todo el día y los cinco minutos que no se ven, se llaman y se preguntan: “¿Cómo estás amor?”. A ver, pensemos: ¿Cómo carajo va a estar? ¿Qué pudo haber hecho en los cinco minutos que no lo viste? ¿Repirar tal vez?
♥El conformismo me irrita los nervios. Lo veo en esas parejas que le tienen tanto pero tanto miedo a la soltería y solo se aguantan al mediocre que tienen al lado para no volver a pertenecer al grupo de los “Viva la pepa” (Seeee, conozco muchísimas de esas).
♥Las que más me causan gracia son esas parejas que como te ven soltera charlan cuando te vas de su casa sobre que amigo demente pueden presentarte, porqué a pesar de que les hayas contado que estás enamorada de tu carrera, que estas copada con tu trabajo, con tus planes, tus paseos y la estés pasando de puta madre cojiéndote o no a quién se te cante, no sos como Roberto y Marita que están juntos hace 5 años y son reeeeeeeeeee felices juntos porque se tienen el uno al otro. ¡Pero dejame de joder!
No, no lo sos. Y es San Valentín y no tenés que demostrarle a ningún "Roberto" con ningún oso, ninguna carta perfumada ni ningún desayuno en la cama lo muuuuuuuucho que lo amas y “crees” en ese amor. Es San Valentín y brindas por vos, por tu libertad y porque sos una menos que va a contribuir en la industria del marketing.
Salut!
Para mi, hace años que esta fecha dejó de ser “la más deseada de una vida plena de amor” para convertirse en una mera fantochada comercial, currera y aprovechadora de pobres parejas inseguras que la utilizan como confirmación de algo que a veces puede estar muy pendiente de un hilo.
Aclaro: Voy a dejar exentos a esos pequeños adolescentes enamorados, los del cosquilleo, los de las cartitas de amor en hojas “Rivadavia”, ahora si, los que hayan pasado esa etapa pueden empezar a leer mis bellas palabras.
Mientras pienso en lo que voy a escribir, me detengo (por unos segundos) para cuestionarme si es que me estoy poniendo un poco insensible con los años, con mis jóvenes y sabios (también humildes, claro) años…Pero inmediatamente me doy cuenta que no, que no se trata de sensibilidad o insensibilidad sino que estoy reivindicando justo hoy lo que pienso de esas parejitas insoportables que el 14 de febrero y gracias a las garcas empresas especializadas en Marketing potencian mis ganas de extinguirlas cual aporte a la sociedad.
Como obsequio y a falta de bombones con enorme moño colorado, les entrego una reseña con las características de las parejas pelotudas que de veras no tienen ni ton ni son:
♥El “Nos” inclusivo hasta por demás. Esas que piensan que haber dejado de ser una persona es lo mejor que les pudo pasar.
♥El abandono por completo del espacio propio para crear un lugar compartido que va desde el gimnasio, las compras en el súper, las reuniones con amigos y hasta las visitas familiares. Jamás voy a entender como existen personas que mueren de ganas por estar con la familia del otro para sentirse parte de “algo”. Queridos, vivan su pareja lejos y sin joderle el asado a nadie please!. (Ok. Esta va con dedicatoria…)
♥Esas parejitas en las que los tipos,pasados los 20 y pico, le compran ositos de peluche a su media naranja. Muy pero muy ridiculo y…grasoso, si.
♥Esas en las que las minas, novias de esos tipos regaleros, abrazan el oso horrendo como si tuvieran cinco años y le proponen a su novio pasar la tarde eligiéndole el nombre para bautizarlo como “el hijo” de la pareja. Es demasiado irritante.
♥El regalo de la caja de bombones carísimos con 40 grados de calor, no da. Posta que no dá.
♥Esa actitud de en San Valentín llevarte a un telo como la gente, solo porque es San Valentín tampoco dá chicos!.
♥Los apodos como “Chanchi” o “Osita”, o PEOR las que se dicen “Gordi” o “Bebé”. Diossssssssss! Ya nadie usa la creatividad, es evidente.
♥Los llamados constante por celular, porqué obvioooo ahora está eso de tener al otro “Free” y taladrarle el cerebro como re top!. (Si, me pongo reiterativa en este punto, lo reconozco). Son esas parejitas que están juntas todo el día y los cinco minutos que no se ven, se llaman y se preguntan: “¿Cómo estás amor?”. A ver, pensemos: ¿Cómo carajo va a estar? ¿Qué pudo haber hecho en los cinco minutos que no lo viste? ¿Repirar tal vez?
♥El conformismo me irrita los nervios. Lo veo en esas parejas que le tienen tanto pero tanto miedo a la soltería y solo se aguantan al mediocre que tienen al lado para no volver a pertenecer al grupo de los “Viva la pepa” (Seeee, conozco muchísimas de esas).
♥Las que más me causan gracia son esas parejas que como te ven soltera charlan cuando te vas de su casa sobre que amigo demente pueden presentarte, porqué a pesar de que les hayas contado que estás enamorada de tu carrera, que estas copada con tu trabajo, con tus planes, tus paseos y la estés pasando de puta madre cojiéndote o no a quién se te cante, no sos como Roberto y Marita que están juntos hace 5 años y son reeeeeeeeeee felices juntos porque se tienen el uno al otro. ¡Pero dejame de joder!
No, no lo sos. Y es San Valentín y no tenés que demostrarle a ningún "Roberto" con ningún oso, ninguna carta perfumada ni ningún desayuno en la cama lo muuuuuuuucho que lo amas y “crees” en ese amor. Es San Valentín y brindas por vos, por tu libertad y porque sos una menos que va a contribuir en la industria del marketing.
Salut!
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